Todo lo expuesto anteriormente ha sido una breve introducción a la parte central de esta sección.

¿Quiénes son?

En los últimos años se ha hablado mucho sobre los guías espirituales. Mucha gente los llama ángeles y en parte lo son, si entendemos como ángeles a seres espirituales, pues los guías también lo son.

Nuestra percepción de los guías espirituales es de seres espirituales cercanos a nosotros, que como su propio nombre indica, nos guían, nos ayudan y acompañan en nuestra vida ( si te sientes más cómodo llamándolos ángeles, está bien, no dejes que una palabra desvirtúe su significado.)

¿Quién puede sentirse cercano a nosotros?

Si partimos de la base de que lo que une a los dos mundos, el físico y el espiritual, es el amor, lógicamente éste será el nexo que una a los guías con nosotros.

Por lo tanto cualquier ser que sienta amor por nosotros podrá ser nuestro guía espiritual.

Esto hace que el abanico de guías espirituales sea muy amplio y de hecho lo es, empezando por nuestros propios familiares ya fallecidos. ¿Quién puede negar que el amor que un padre o una madre siente por sus hijos desaparezca tras la muerte?

No hay barreras que cierren el paso al amor que un ser siente por su familia.

Personas que hemos conocido, amigos más o menos cercanos, pueden ser nuestros guías espirituales.

Maestros y profesores en todas las ciencias y artes. Un médico que haya dedicado toda su vida a curar enfermos, tras fallecer tratará de guiar con sus conocimientos a personas que se dediquen a la curación.

Un músico o un filósofo tratará de inspirar a personas afines a su música o su filosofía.

Y así un largo etcétera.

¿Cómo influyen en nuestra vida? ¿Cómo nos ayudan?

Lo primero que debemos plantearnos es para qué vivimos, ¿Cuál es la finalidad de la vida?

Habrá quien piense que nacemos para crecer, tener descendencia, vivir y fallecer, sin buscar más allá.

En Serendipity pensamos que como seres espirituales que somos ante todo, la vida es un paso más dentro de nuestro desarrollo. Por lo tanto vivir significa aprender, enseñar, crecer, desarrollar y adquirir nuevas capacidades, hacer uso de ellas, amar y sentirnos unidos a todo lo que nos rodea.

Los guías espirituales están ahí para ayudarnos a vivir y a desarrollarnos, igual que el resto de personas que nos rodean físicamente.

Debemos tener en cuenta algo importante. La ayuda que nos puedan dar nuestros guías irá siempre dirigida hacia nuestras necesidades para desarrollarnos como seres espirituales que somos.

Necesitar no es lo mismo que querer.

Los guías no van a darnos el número ganador de la lotería, ni van a predecir nuestro futuro.

Los guías fomentarán lo mejor de nosotros mismos. Nos ayudarán a hacernos conscientes de nuestras capacidades y cómo usarlas de una manera práctica en este mundo.

¿Cómo pueden comunicarse con nosotros?

Antes hablábamos de los médium y su capacidad para comunicarse con el mundo espiritual.

En este apartado queremos explicar cómo es la comunicación en sentido inverso y cómo establecen ellos la comunicación con nosotros.

Ya no disponen de un cuerpo físico con el que podamos verlos o tocarlos, por lo que deben usar otros canales para comunicarse.

Para ello utilizan nuestra mente, en concreto nuestro pensamiento.

No se trata de una manipulación de nuestra mente, no de manera que puedan obligarnos a hacer nada que no queramos o afectarnos negativamente.

El ser humano tiene la facultad del libre albedrío, por lo que siempre tendremos la capacidad de decidir qué hacer con nuestro destino.

Por esto es tan importante que calmemos nuestra mente. Cuanto más tranquilos podamos estar, más podremos sentir su presencia y su guía.

Técnicas como la meditación, el Yoga, el Tai Chi, o cualquier tipo de actividad que te ayude a relajar tu mente, servirán para que tu canal de comunicación se vaya abriendo y vayas percibiendo con más claridad los mensajes que nos envíen.

También a través de los sueños ellos transmiten sus mensajes.

Cuando no seas capaz de percibirlos directamente, ellos buscarán la manera de hacerte llegar sus mensajes, bien a través de personas afines a ti o de médium capacitados para transmitir la información.

Los guías espirituales siempre vendrán con mensajes de amor, apoyándonos cuando estemos tristes, aconsejándonos cuando no sepamos que dirección seguir y animándonos en nuestra labor espiritual.


¿Cuántos guías tenemos?

Ésta es una pregunta que hace mucha gente.


No hay manera de contabilizar el número de guías que tendremos a lo largo de nuestra vida, así como tampoco podemos contar el número de personas que vamos a conocer.


Siempre hay uno que podríamos decir que más nos ayuda en un preciso momento, acorde con las necesidades que tengamos.


Por poner un ejemplo de un caso real, una mujer cuyo esposo había fallecido, quería saber si él era su guía en ese momento.


Cuando Joyce Morgan le hizo el retrato, apareció un tío suyo al que reconoció, pero aún y así no fue de su agrado, ya que él no había hecho mucho por la familia mientras vivió. Tras una conversación, la señora reconoció que estaba pasando por problemas legales y su tío había sido abogado, por lo que era más importante su presencia y su ayuda en ese momento, que la que su marido le podía prestar. Él estaba seguro con ella, pero su tío podía ayudar mejor en sus necesidades actuales.


Recuerda que están para apoyarnos en nuestras necesidades, no en nuestros deseos.


Resumiendo, siempre y cuando seamos capaces de relajar, calmar nuestra mente consciente y quedarnos en un estado meditativo, la comunicación será posible. Con la práctica verás como todo fluye más fácilmente.